Balance del (d)año

Parecía que iba a ser un buen año, joder, sí que lo parecía.
Pero como pasa siempre, o casi siempre, las apariencias engañan. Y mucho.

Es como cuando lo único interesante que te ha pasado en todo el día se basara en que hiciste una bolsa de palomitas en el microondas.
Pues algo así.

Pero como yo por mis propios medios ya pienso bastante sobre "lo dura que es la vida" y todas esas cosas que se dicen pero a las que nunca se pone solución, será mejor que me centre en las buenas.

Porque de todas formas, no cambiará nada por mucho que me lamente.
Porque, además, nadie podrá devolverme mis horas de sueño y cansancio acumulado, aunque visto desde aquí haya valido la pena (más o menos).

No ha sido un año maravilloso, ni de esos que vale la pena recordar, pero...
SOY FELIZ.
(...creo)
Estoy donde quiero estar y hago lo que quiero hacer y para mí, de momento, me vale.

Ha sido un año de transición.
(...espero)

Gracias por otro año más.
Gracias 2014.